Profesionales del CAS Baluard, gestionado por ABD, imparten cursos de capacitación y reducción de daños en Colombia

Las profesionales del servicio CAS Baluard de la Agencia de Salud Pública de Barcelona y gestionado por la Asociación Bienestar y Desarrollo (ABD), Ester Aranda y Gemma Balaguer, se hallan estos días en la ciudad de Medellín (Colombia) junto a la organización amiga Corporación Surgir. A lo largo de toda la semana han estado realizando seguimiento y evaluación sobre la implementación del Proyecto TRANS-MET, e impartiendo capacitaciones a profesionales sobre estrategias de reducción de daños en el consumo de drogas.

Desde el año 2018, con el apoyo del Ayuntamiento de Barcelona y el trabajo técnico entre la Asociación Bienestar y Desarrollo ABD  y la entidad colombiana Corporación Surgir, se ha estado trabajando en un proceso de intercambio con el fin de encontrar la mejor forma de adaptación de estrategias de reducción de daños en los Centros de Escucha de Medellín, y más específicamente cómo implementarlo con personas sin hogar.

En el año 2019 se hizo realidad la posibilidad de empezar a trabajar con esta población, lo cual se inició con el aporte de la Secretaría de Salud de Medellín y la contribución del Ayuntamiento de Barcelona, apoyo gracias al cual se está dando continuidad al proyecto este 2020. De esta forma se están pudiendo concretar mucho mejor los resultados obtenidos hasta diciembre de 2019.

Para consolidar el vínculo del Centro de Escucha con la población beneficiaria, este proyecto ha estado mediado por el intercambio de alimentos y ropa.

Algunas cifras significativas del avance del Centro de Escucha para personas sin hogar en 2019 fueron a nivel comunitario, 57 actividades de enganche en las que participaron aproximadamente 600 personas. Además, hubo 83 casos atendidos que recibieron educación en salud, educación sobre prácticas de reducción de daños frente al consumo de SPA, y educación en sexualidades.

Otros beneficios del proyecto TRANS-MET

El acompañamiento para la reducción de daños y riesgos asociados también ha permitido:

• Fortalecer la educación para un consumo de sustancias más responsable y más consciente. A su vez, ha orientado a casos atendidos, si es su voluntad, para su ingreso a programas de tratamiento, rehabilitación y atención a drogodependencias en el sistema de salud.
• Ofrecer talleres de reducción de daños asociados a basuco (cocaína fumable) en donde se ha hablado sobre la utilización de materiales menos tóxicos para la elaboración de pipas, uso de boquillas y cuidados de la cavidad oral. Con las personas inyectoras de sustancias se han realizado talleres de inyección higiénica de menor riesgo, uso de parafernalia higiénica y atención de sobredosis por opioides. Además, se entregaron dos dosis de naloxona por persona.

Con el apoyo de: