Violencia Sexual en Espacios de Ocio y Entretenimiento: La violencia sexual afecta especialmente a mujeres jóvenes y a la población LGBTQI+, frecuentemente en espacios de ocio y entretenimiento. El consumo de sustancias contribuye a la naturalización y legitimación de la violencia contra las mujeres, a apoyar las actitudes y comportamientos de culpabilización de las víctimas; y también actúan como un gran obstáculo para intervenir en estas situaciones.

Los datos disponibles en la UE muestran que el 9 % de las mujeres de entre 18 y 29 años han sufrido violencia sexual por parte de un agresor que no era su pareja desde los 15 años.

En España, según la macroencuesta sobre violencia contra las mujeres (2019), las mujeres de entre 18 y 24 años tienen más probabilidades de sufrir violencia sexual por parte de un agresor que no sea su pareja que el siguiente tramo de edad (11,5% frente a 8,2% en la edad 25-34 años). Del total de mujeres que participaron en la encuesta, el 17,8% había experimentado esta agresión en lugares comunes de vida nocturna, ocio y socialización como discotecas, bares o pubs..

Además, el análisis de casos y sentencias sobre fobia LGBTQI+Q+ y otras formas de discriminación indica que las agresiones físicas perpetradas por hombres contra hombres homosexuales suelen tener lugar en espacios públicos al aire libre o en establecimientos de ocio (55%).